Qué entendemos por optimismo
Como dice el psiquiatra Luis Rojas Marcos, «la estrecha vinculación que existe entre nuestro estado emocional y nuestros pensamientos nos ofrece la oportunidad de fomentar la disposición optimista trabajando simultáneamente en el estado de ánimo y en la forma de pensar”.
A partir de esto, se suele producir un proceso hacia lo que llamamos conducta optimista o pesimista que sigue el recorrido que describimos en el proceso que os dejamos a continuación:
PROCESO DEL OPTIMISMO (DESDE EL PENSAMIENTO A LA CONDUCTA)
- CRITERIOS. OPINIONES. CREENCIAS. CONOCIMIENTOS. Deben ser: positivos, acordes con la razón y los datos objetivos. No extremistas, catastrofistas, subjetivos…
- De los pensamientos se derivan las EMOCIONES Y SENTIMIENTOS. Deben ser agradables, positivos, satisfactorios
- A ellos les sigue la MOTIVACIÓN. Crea el deseo de conseguir lo que se propone, se sabe con capacidad y seguridad para ello.
- Se genera tendencia, inclinación, ACTITUD, IMPULSO
- Así surge la CONDUCTA, el COMPORTAMIENTO optimista. Se desarrollan las acciones necesarias para conseguir el objetivo
- El proceso concluye y produce la situación de SATISFACCIÓN, BIENESTAR, FELICIDAD.
“Nada es tan difícil como parece; todo es más gratificante de lo que esperas; si algo puede salir bien, saldrá, y en el mejor momento posible” (John C. Maxwell).
Información recopilada del libro «OPTIMISMO A PESAR DE TODO Historias actuales de conductas optimistas ante la vida»
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